Cuidado del prematuro: Impacto del Plan Canguro en Colombia

¿Cuándo es considerado un bebé prematuro? 

Según la Organización Mundial de la Salud – OMS, un bebé se considera prematuro si al nacer no supera las 37 semanas de edad gestacional, independientemente de su peso. Así mismo, cuando pesa menos de 2500 gramos se considera con bajo peso al nacer. Debido a sus riesgos los bebés prematuros y de bajo peso al nacer entran al Programa Canguro, que promueve el bienestar del recién nacido.

Los bebés prematuros o con bajo peso pueden presentar complicaciones durante el parto, ya que no están completamente maduros. En este periodo crítico, requieren cuidados especiales para evitar riesgos como hipotermia, infecciones, dificultades en la alimentación y alteraciones respiratorias. Por eso, el cuidado de estos bebés se centra en el Método Madre Canguro, reconocido por favorecer su crecimiento y desarrollo en un entorno seguro y afectuoso. 

La importancia de la lactancia materna exclusiva en bebés prematuros 

La lactancia materna exclusiva es importante porque no solo es la mejor manera de alimentar al bebé y protegerlo contra enfermedades, sino que también genera un vínculo privilegiado para que la madre y el bebé se descubran y se adapten mutuamente. 

Para una lactancia materna exclusiva es importante: 

• El deseo de la madre de amamantar.

• El contacto temprano entre la madre y el bebé.

• La buena postura del bebé en el seno.

• La tranquilidad de la madre al momento de amamantar.

La leche materna es el alimento ideal, ya que contribuye al aumento de peso, fortalece el sistema inmune y favorece la estabilidad del recién nacido. En caso de que el bebé no gane peso de manera adecuada, se realizan exámenes médicos para descartar enfermedades. Si el crecimiento continúa siendo bajo, el pediatra evaluará complementar la alimentación con una fórmula especial para prematuros. 

Cuando la madre no puede amamantar, existen alternativas seguras como los bancos de leche humana, que garantizan una nutrición adecuada para el bebé. 

¿De qué se trata el Programa Canguro?

El Programa Canguro busca transferir gradualmente las responsabilidades del cuidado físico y emocional del bebé del personal de salud a la familia. Este método se compone de tres elementos fundamentales:

1- Posición Canguro o contacto piel a piel: el bebé se coloca verticalmente en el pecho de la madre, el padre o el cuidador en contacto directo con la piel, las 24 horas del día.  

2- Lactancia materna exclusiva: es la principal fuente de nutrición y protección inmunológica.

3- Seguimiento ambulatorio continuo: durante el primer año corregida se realiza seguimiento por pediatría, enfermería, oftalmología, psicología y otros profesionales que monitorearan el crecimiento y el desarrollo del bebé.

Esta práctica permite que el recién nacido regule su temperatura, mejore su respiración, estabilice sus signos vitales y fortalezca el vínculo afectivo con sus padres. Además, favorece el inicio de la lactancia, reduce el riesgo de infecciones y estimula su desarrollo neurológico.

Condiciones de la Posición Canguro

Algunas condiciones importantes para mantener correctamente la Posición Canguro son:

- Mantener al bebé en posición vertical, cerca del pecho, solo alejándolo para alimentarlo o cambiarlo.

- La posición debe ser continua, prolongada y duradera, las 24 horas del día, por tantos días o semanas como el bebé lo necesite.

- No se debe fajar al bebé, ponerle botones en el ombligo ni colocarle objetos en brazos o muñecas.

- Antes de alzarlo, realiza un lavado de manos adecuado.

- Aliméntalo únicamente con leche materna o lo indicado por el pediatra.

- Al vestirlo, busca mantener el calor y el contacto piel a piel: utiliza gorro, camiseta abierta al frente, sin mangas, pañal y medias.

- No lo bañes tradicionalmente. Puedes limpiarlo con paños de agua tibia o algodón humedecido.

¿Qué no hacer mientras el bebé está en Posición Canguro?

Evita:

- Sacarlo del pecho para algo diferente a cambiarlo.

- Acostarlo en posición horizontal.

- Usar chupos, fajarlo o ponerle botones en el ombligo.

- Bañarlo sumergiéndolo en agua.

- Colocarle pulseras u otros objetos en muñecas o brazos.

- Ofrecerle alimentos distintos a la leche materna o los indicados por el pediatra. 

¿Cómo evito complicaciones si mi hijo es prematuro?  

Asiste a todos los controles del Programa Canguro, donde se hace seguimiento al aumento de peso y desarrollo del bebé hasta el año de edad corregida. Además, evita el contacto con personas con síntomas respiratorios, realiza lavado de manos frecuente y mantén al bebé en un entorno limpio y tranquilo.

Mientras el bebé requiera la posición canguro, mantenlo en contacto piel a piel 24 horas al día. Recuerda que el afecto, el cuidado y la presencia de la familia son indispensables para su desarrollo.

¡Signos de alarma!

Si mamá, papá o cuidador nota alguno de estos síntomas, deben acudir de inmediato a la IPS más cercana:

- Fontanela abombada.

- Piel amarilla en cara, torso, piernas u ojos.

- Dificultad para tomar el pecho o beber.

- Vómito constante.

- Somnolencia excesiva o llanto muy débil.

- Movimientos anormales como temblores o sacudidas.

- Respiración muy rápida, pausas o hundimiento de costillas.

- Piel muy pálida o azulada.

- Temperatura menor a 36°C o mayor a 37.5°C.

- Ausencia de deposiciones por más de dos días.

- Heces blancas, negras o con sangre.

- Menos de tres pañales mojados al día.

- Boca seca, ojos hundidos, llanto sin lágrimas.

- Signos de delgadez o inflamación de brazos o piernas.

En EPS Famisanar te acompañamos en el cuidado de tu familia.

Fuente: MedlinePlus 

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